Para el periodo 2020-2021 se detectó un cambio neto de superficie de pastizales de 213.755 ha en los municipios priorizados, variando de 2.686.439 ha, a 2.900.193 ha. En esta dinámica se registró una pérdida de pastizales de 38.454 ha, las cuales fueron reemplazas por vegetación secundaria o en transición (20.082 ha) y tierras degradadas (11.362 ha). De igual manera, 2.647.984 ha del área de pastizales permaneció sin cambio (Figura 1).
Luego de analizar esta dinámica de las coberturas de pastizales, se identificaron 252.208 ha, como superficies nuevas de pastos en el periodo 2020-2021. Esas superficies praderizadas, en el año 2020 eran bosques 45,8 % (115.410 ha), vegetación secundaria 32,1 % (80.962 ha) y herbazales 1,9 % (4.715 ha).
El periodo (2020 – 2021) ha sido el de mayor tasa anual de praderización en el área ocupada por los municipios seleccionados, superando el periodo 2016 – 2018. Adicionalmente, para este último periodo se evidenció un aumento de la tasa media anual de praderización de 79.754 ha/año respecto a lo reportado del periodo anterior (2018-2020) (Figura 2).
Figura 1. Localización de las áreas praderizadas en el periodo 2020-2021 en los 17 municipios priorizados. Fuente: SINCHI, 2022
Figura 2. Tendencia de la Tasa media anual de praderización (ha/año) periodo 2002 – 2021 en los 17 municipios priorizados. Fuente: SINCHI, 2022