Equipo técnico:
Edwin Agudelo Córdoba, Marcela Núñez-Avellaneda, Astrid Alexia Acosta-Santos, Juan David Bogotá-Gregory, William Castro Pulido, César Augusto Bonilla-Castillo, Gúber Alfonso Gómez-Hurtado, Iván Gerardo González-Gómez, Liliana Palma SilvaIvone, Maritza Aricari Dámaso y John Jairo Potosí Chuña.
Palabras clave
Colecciones biológicas, caracterización, índice calidad de agua, mercurio en peces, recurso hídrico, piscicultura.
Área geográfica
Amazonia colombiana en zonas hidrográficas Amazonas, Putumayo, Caquetá, Vaupés, Inírida y Guaviare. Municipios: Leticia, Leguízamo, Puerto Asís, Piamonte, Florencia, Belén de los Andaquíes, Mitú, San José del Guaviare, Puerto Inírida.
El conocimiento del territorio, especialmente de los ecosistemas acuáticos, se fortalece a través de la generación de información biológica, ecológica y biofísica relacionada con la biodiversidad, la calidad del agua, el uso de recursos hidrobiológicos, las amenazas existentes, los beneficios derivados, y las estrategias de monitoreo y conservación. Este conocimiento aporta datos esenciales para la toma de decisiones en procesos de zonificación ambiental, la gestión y uso sostenible de los recursos hídricos, y el diseño de planes de vida que beneficien a los pobladores y comunidades que dependen de estos ecosistemas.
Resultados
Durante el año 2023, se evaluaron las subzonas hidrográficas de río Putumayo directos, río Ortegüaza, río Caquetá medio, bajo Vaupés, medio río Guaviare y río Inírida. Para el departamento de Guainía se adelantó una caracterización limnología en la Estrella Fluvial Inírida, que corresponde a las subzonas hidrográficas; 3108 Inírida, 3214 bajo Guaviare y 3804 directos Atabapo, para 15 estaciones al respecto de la transparencia, temperatura, conductividad, pH, oxígeno disuelto, solidos totales disueltos.
El análisis de 35 variables físicas y químicas registra una diferenciación entre los sistemas de las cuencas estudiadas, los valores más altos pH, conductividad y sólidos totales disueltos corresponden a Guaviare en razón a su origen andino. Los menores valores se registran en Atabapo, exceptuando temperatura, oxígeno disuelto y saturación de oxígeno. Sin embargo, si se comparan con otros ecosistemas como los influenciados por el río Amazonas, los del Guainía presentan bajos valores de pH, conductividad y nutrientes, atribuidos a su mineralización y geografía.
Respecto a los índices de calidad y de contaminación del agua, de manera general cada uno de estos presentó una buena calidad. Para las estaciones que mostraron una clasificación de contaminación, los análisis revelaron un sesgo por la fuerte relación existente entre algunas de las variables usadas para su cálculo y las particularidades de la estructura geológica de la región, más que con condiciones reales de contaminación por efecto de aguas servidas y/o mineralización. En el caso de los índices ICOMI (contaminación por mineralización) e ICOSUS (contaminación por sólidos suspendidos), la contaminación es muy baja, resultado de la escaza mineralización y sólidos disueltos, típicos de sistemas de aguas negras como es el caso del área de estudio.
Los indicadores de calidad de agua son de gran utilidad para sintetizar información y establecer condiciones de la calidad de agua en un momento dado, sin embargo, se recomienda tener presente las características limnológicas naturales propias, aspectos hidrológicos y geográficos que pueden incidir en los valores de las diferentes variables incluso de origen humano.
En cuanto a la cuantificación de metales pesados particularmente mercurio total – HgT en recursos hidrobiológicos, se registraron peces con alto contenido de Hg en todas las localidades muestreadas. Los resultados indican concentraciones muy altas (> 0,750 mg HgT/kg) en muestras de peces depredadores como el dormilón (Hoplias spp), baboso (Brachyplatystoma platynemum), dorado (Brachyplatystoma rousseauxii), simí (Calophysus macropterus), amarillo (Zungaro zungaro), lechero (Brachyplatystoma filamentosum), pintadillo (Pseudoplatystoma spp), caribe (Pygocentrus spp), pavón (Cichla spp), camiseto (Brachyplatystoma juruense), machete (Raphiodon sp), guaraja (Hoplerythrinus sp), salmón (Salminus sp), agujo (Boulengerella spp), corvina (Plagioscion sp) y concentraciones altas (0,501 – 0,750 mg HgT/kg) en ejemplares de peces de los géneros ya mencionados junto con bocón (Ageneiosus sp), caloche (Gymnotus carapo) y carawazú (Astronotus ocellatus).
En el caso particular de la Zona Ramsar EFI, el 56 % de los ejemplares analizados (179), estuvo por debajo del valor de referencia (<0.5mg/kg), teniendo a especies de nivel trófico alto como tucunaré, guaraja, caribe, sími, pintadillo, payara y barbachato por encima del límite permisible para consumo humano. El mayor valor correspondió a tucunaré mientras que bocachico, palometa, sapuará y mapará, especies de gremios tróficos inferiores, presentaron bajas concentraciones. Los resultados obtenidos indican un riesgo en la salud ambiental por contaminación de recursos hidrobiológicos y riesgo para la salud humana. Por lo que grupos humanos de mayor grado de vulnerabilidad (niños, mujeres en edad fértil, embarazadas) deben evitar el consumo de especies como las aquí listadas, en pro de disminuir el riesgo de exposición al Hg mediante la reducción en la ingesta de este tipo de peces.
Los resultados sugieren que es de gran importancia mantener las características actuales de los componentes del paisaje (interfaz tierra-agua), con el fin de mantener el estado natural de estos ecosistemas y de esta forma garantizar su integridad, poder conservar su diversidad asociada y mantener el aprovisionamiento de servicios ecosistémicos que en muchos casos representa la única fuente de ingresos o de alimento para las poblaciones locales. Por lo que a nivel de la macrocuenca Amazonas, el documento técnico elaborado presenta informaciones y análisis sobre la heterogeneidad de la cuenca, biodiversidad acuática, el aprovisionamiento por pescado, riesgos para la biodiversidad acuática por deforestación, cambio de la cobertura de ronda hídrica y la contaminación por mercurio.
Se exalta la necesidad de conservación y restauración de las rondas hídricas, apostar hacia la reducción de la deforestación y la degradación de los ecosistemas acuáticos amazónicos, el monitoreo de la biodiversidad, el fortalecimiento de la gobernanza regional, como la integración de saberes y el intercambio de conocimientos para abordar la heterogeneidad del territorio y así contribuir al ordenamiento del mismo.
Fichas del capítulo III