Introducción

Uno de los retos mundiales es mantener los recursos hídricos en buenas condiciones ambientales las cuales se reflejan en sus atributos físicas, químicas y biológicas, y en general ecosistémicos (DMA, 2000). Dada la complejidad del funcionamiento de los ambientes acuáticos y los diferentes tipos de amenazas, el uso de estos indicadores resulta muy útil, ya que tienen el potencial de recoger información para evaluar el estado de los mismos. Para la vigencia 2019, se utilizaron índices de contaminación (ICOS) para ambientes acuáticos del departamento de Guaviare, medidos por mineralización (ICOMI), materia orgánica (ICOMO) e índices de integridad biológica (IBI) a partir de macroinvertebrados.

Además de la calidad del agua (revisada para Guaviare), la biodiversidad acuática está siendo objeto de continuas alteraciones antrópicas, que afectan la disponibilidad de los servicios ecosistémicos que benefician a pobladores de comunidades locales, regionales y globales (Castello & Macedo 2015). En ese sentido, se han monitoreado algunas variables asociadas a esas alteraciones, como lo es la concentración de mercurio total en peces de consumo local con interés comercial regional y sus tamaños de captura, ya que son la principal fuente de proteína durante todo el año, con consumo per cápita en torno de los 100 g de pescado/día (Agudelo 2015).

 Localización geográfica

Departamento de Amazonas en el municipio de Leticia, departamento de Vaupés en el municipio de Mitú, departamento de Putumayo en el municipio de Puerto Leguízamo, departamento de Guainía en el municipio de Puerto Inírida y departamento de Guaviare para estaciones circundantes a la Serranía de La Lindosa, en inmediaciones de los municipios de San José del Guaviare y El Retorno (Caño Trueno parte Alta en el Cerro La Pizarra, Caño Trueno en la Estación Experimental, Caño Arenas, Caño La Lindosa La Recebera, Caño Agua Bonita, Caño NN 20m antes de la Desembocadura del Caño Yamú, Caño Sabana, Caño Arenales, Caño La Fuga).

Se realizaron medidas en el agua utilizando equipo multiparámetro marca Hanna para: pH (unidades), temperatura (°C), conductividad (µS.cm-1), Sólidos totales disueltos (mg/L), oxígeno disuelto (mg/L) y porcentaje de saturación de oxígeno (%). Al mismo tiempo se colectaron muestras de agua para análisis en laboratorio especializado para alcalinidad (mg/L), dureza total (mg/L), DBO5, coliformes totales, sólidos totales, de acuerdo con la metodología de APHA-AWWA-WPCF (Rice et al. 2017).

 Resultados

 Fisicoquímica e índices de calidad acuática

La fisicoquímica del agua in situ en los sistemas fluviales muestreados en Guaviare, registró temperaturas entre 23.46 a 25.40 (promedio  24.40 °C), conductividad 2.5 y 18 (promedio 7.31 µS.cm-1); pH de 4.69 a 6.39 (promedio  5.53 unidades), oxígeno disuelto entre 4.82 a 8.79 (promedio  7.29 mg/l) y sólidos totales disueltos entre 1 y 9 (promedio  3.63 mg/L). Respecto a la mineralización se obtuvieron valores de conductividad entre 7 y 18 µS.cm-1; alcalinidad entre 6-13 mg/L (promedio  7.66 mg/l) y de dureza entre 4-8 mg/L (promedio  5.11 mg/l).

Para la DBO se registraron valores entre 4 y 5 (promedio ≈ 7.66 mg/l), no obstante, las aguas puedan recibir aportes de carga orgánica, el sistema los procesa rápidamente. Para coliformes totales en los sitios de muestreo, se presentaron entre 63 NMP (NMP/100mL o número más probable) y 50.000 NMP/100mL. El porcentaje de saturación de oxígeno en su mayoría fue superior al 80%. A partir de las variables de alcalinidad, dureza, DBO, coliformes totales y sólidos totales disueltos, se estimaron algunos de los índices de contaminación llamados ICOs, cuyas categorías de valoración del índice y su referencia colorimétrica se encuentran en la tabla 5.

ICOs Contaminación Escala de Color
 0 – 0,2 Ninguna Azul
> 0,2 – 0,4 Baja Verde
> 0,4 – 0,6 Media Amarillo
> 0,8 – 1 Muy alta Rojo

Tabla 5. Categoría de los ICOs (Ramírez et al. 1997)

  • Índice de contaminación por mineralización (ICOMI): Tiene en cuenta conductividad, la dureza y la alcalinidad. Los valores del índice se registraron entre 0,01 – 0,021 lo que indica que los ecosistemas muestreados no presentan contaminación por mineralización.
  • Índice de contaminación por materia orgánica (ICOMO): En el cálculo de ICOMO intervienen las variables Demanda biológica de oxígeno (DBO), Coliformes totales y Saturación de oxígeno. Para este índice se registraron las categorías de ninguna (azul) a baja (verde) contaminación (Figura 23); aunque pueden existir aportes de carga orgánica, el sistema los procesa rápidamente.
Figura 23. Índice de contaminación por materia orgánica (ICOMO)

Figura 23. Índice de contaminación por materia orgánica (ICOMO) en ríos del Guaviare. Convenciones: barras de color azul define no contaminación, barras de color verde baja contaminación, barras de color amarillo contaminación media y barras de color rojo alta contaminación. Fuente: Grupo de Ecosistemas acuáticos, Instituto SINCHI 2020

El caño Trueno, Caño Arenas y Caño La Lindosa, presentaron color amarillo y rojo. Si bien dan indicio de contaminación por materia orgánica, es necesario que se realicen muestreos aguas arriba y aguas abajo del punto de muestreo para establecer si existe una fuente que está afectando de manera parcial las condiciones de calidad de agua. Otro factor, es que el muestreo representa las condiciones en aguas bajas y puede tener cambios en su dinámica en otros niveles de agua y caudal.

Bioevaluación de ríos: Índice de Integridad Biológica.

En 2019, se evaluaron ocho (8) estaciones lóticas circundantes a la Serranía de la Lindosa, en inmediaciones de los municipios de San José del Guaviare y El Retorno. La bioevaluación de estos ecosistemas acuáticos se realizó mediante la aplicación del índice de integridad biológica -IBI con macroinvertebrados, el cual relaciona variables o atributos biológicos individuales con un gradiente de condiciones ambientales (Karr & Chu, 1999; Moya et al. 2011). Para este análisis se incluyen variables de composición, riqueza, grupos tróficos, abundancia por sustratos o microhábitat, indicadores ecológicos e indicadores de sensibilidad y/o tolerancia de los ensamblajes de macroinvertebrados encontrados, siguiendo la metodología descrita en Solano-Figueroa et al. (2012), estas dos últimas categorías con el fin de captar con mayor sensibilidad alteraciones antropogénicas. Los valores registrados de IBI se obtienen a partir de la selección de 12 variables, el rango de calificación del indicador oscila entre los puntajes 12 y 60, y se establecen 5 categorías de bioevaluación Tabla 6.

Puntaje-IBI

Integridad del ecosistema

Escala de color

=60

Muy buena Azul

>48 – 59

Buena

Verde

>36 – 48 Moderada

Naranja

>24 – 36

Mala

Amarillo

≤24 Pésima

Rojo

Tabla 6. Distribución de categorías del IBI para ríos de la Serranía de la Lindosa- Guaviare

Los valores del IBI obtenidos en la bioevaluación de ríos en la Serranía de la Lindosa, figura 24, muestran que el 50% de las estaciones presentan ¨buenas¨ condiciones de integridad, correspondientes a Caño Trueno Alto, Caño Arenas, Quebrada La Lindosa-pozos y Caño Sabana, con valores IBI oscilan entre 50 y 56 puntos. El restante 50% de las estaciones, correspondientes a Caño Trueno- estación SINCHI, Caño La Fuga, Quebrada La Lindosa- Recebera, Quebrada La Lindosa- Arenoso, presentan condiciones de integridad ¨moderadas¨ con puntajes entre 40 y 48.

Figura 24. Resultados del índice de integridad biológica -IBI por sitio.

Figura 24. Resultados del índice de integridad biológica -IBI por sitio. Convenciones: barras de color azul definen muy buena condición, barras de color verde buena condición, barras de color naranja moderada, barras de color amarillo malas condiciones y barras de color rojo pésima condición. Fuente: Grupo de Ecosistemas acuáticos, Instituto SINCHI 2020.

El cálculo de IBI para ecosistemas acuáticos de la Serranía La Lindosa, evidenció que en los lugares con ¨buena¨ integridad biológica se caracterizan por tener valores por encima de la mediana, en las variables más sensibles a los efectos antrópicos como: número de individuos, riqueza total, abundancia relativa de Ephemeropteros, Trichopteros y el índice de sensibilidad EPT/Chi (relación entre organismos sensibles a la contaminación y organismos tolerantes como la familia Chironomidae) solo en el caso de la abundancia relativa de Trichoptera las estaciones Caño Trueno y Caño Arenas obtuvieron valores por debajo de la mediana para la variable en el IBI, sin embargo ambas estaciones obtuvieron 56 puntos del IBI, el mayor valor del estudio, ya que presentaron buenos puntajes en el resto de variables.

Los resultados del IBI obtenidos permiten establecer el estado del ecosistema para propósitos de planeación o comparación futura, lo que se conoce como Monitoreo Base, por lo tanto, se recomienda continuar con condiciones físicas del hábitat o de la calidad del agua en los ecosistemas de la región.

Metales pesados: cuantificación de mercurio en peces (Hg)

Ante el incremento de las emisiones de mercurio como resultado de las actividades antrópicas como la deforestación, extracción de hidrocarburos, minería de oro, mala disposición de aguas residuales y prácticas agrícolas con quema de suelos (Vargas y Marrugo-Negrete 2019), es necesario que para la región amazónica y orinocense, se determine y monitoree la presencia de ese elemento en las matrices bióticas (bacterias, microalgas, zooplancton, macroinvertebrados y peces) y abióticas (aire, agua, sedimento y suelo), con el fin de identificar tendencias del contaminante, y poder establecer un punto de partida de vigilancia o seguimiento de los resultados, de acuerdo con lo estipulado en la Ley 1658 de 2013.

En la Amazonia, el uso de peces como fuente de proteína de origen animal es base de la subsistencia de poblados y habitantes ribereños de los departamentos de Amazonas, Putumayo, Caquetá, Guaviare, Guainía y Vaupés (Agudelo 2015, Agudelo et al. 2000 y 2006, Alonso et al. 2009, Ochoa 2003, Rodríguez 2010). En esa vía, el Instituto SINCHI ha adelantado un trabajo sobre peces amazónicos en distintos lugares de la región, realizando colectas de especies de interés local y perteneciente a distintos niveles tróficos: detritívoro, herbívoro, frugívoro y carnívoro. La determinación cuantitativa de mercurio total se ha realizado con la técnica de espectrofotometría de absorción atómica con límite de detección de 0.001, de acuerdo con la norma EPA 7473 de febrero de 2007.

Para el 2019, se conjugó la información registrada a cerca de 1600 ejemplares muestreados desde el año 2014, que pertenecen a 53 especies, los cuales son empleados en la dieta alimenticia de los núcleos familiares amazónicos urbanos y rurales, con los cuales se desarrolló un visor geográfico para presentar los valores medios de mercurio total (mg/Kg) (Figura 25).

Figura 25. Visor con la cuantificación de Mercurio total en peces, para diferentes sectores de la Amazonia colombiana (datos entre el 2014 y 2018)

Figura 25. Visor con la cuantificación de Mercurio total en peces, para diferentes sectores de la Amazonia colombiana (datos entre el 2014 y 2018). Fuente: Grupo de Ecosistemas acuáticos, Instituto SINCHI 2020.

Para especies pertenecientes a nivel trófico alto (piscívoros y carnívoros) y de elevado interés en el mercado regional y nacional, se encontraron concentraciones de mercurio superiores a la normatividad, basado en el límite permisible definido por la Organización Mundial de la Salud (0.5 mg HgT/kg).

Para el año 2019, se colectó un total de 471 muestras de músculo de peces, pertenecientes a 24 especies. Algunas de las más importantes en la zona son: Mylossoma duriventre (Palometa), Prochilodus nigricans (Bocachico), Plagioscion squamosissimus
(Corvina), Pellona castelnaeana (Arenga), Pellona flavipinnis (Arenga), Pseudoplatystoma punctifer (Pintadillo), Brachyplatystoma rousseauxii (Dorado), Brachyplatystoma platynemum (Baboso), Calophysus macropterus (Mota), Piaractus brachypomus (Paco), Pygocentrus nattereri (Piraña), Serrasalmus spilopleura (Piraña), Astronotus ocellatus (Carawasú), Arapaima gigas (Pirarucú), Semaprochilodus insignis (Yaraquí), Cichla monoculus (Tucunare) y Serrasalmus rhombeus (Piraña), entre otras. El análisis indicó que el 47% de las muestras se encontraron en la categoría de baja concentración de mercurio (< 0,3 mgHg/Kg), 16% en la categoría de concentración media y 175 de las muestras (37%) marcaron valores superiores al valor de referencia (0.5 mg/kg), mg/L. Los resultados 2019 siguen la tendencia de años anteriores, confirmando que especies piscívoras, consideradas depredadores de tope, son las que acumulan la mayor cantidad de Hg, mientras que aquellas especies detritívoras o herbívoras, presentan menores concentraciones.

En ese sentido, se evidencia un claro riesgo de contaminación en los recursos hidrobiológicos y por tanto, a la salud de las personas que habitan la Amazonia y de aquellos no residentes que consumen pescado amazónico. El consolidado señala que bagres como: lechero (Brachyplatystoma filamentosum), dorado (B. rousseauxii), baboso (B. platynemum), pirabutón (B. vaillantii), apuy (B. juruense), pintadillos (Pseudoplatystoma sp.), simí (Calophysus macropterus), barbiplancho (Pinirampus pirinampu), capaz (Playnematichthys notatus), cajaro (Phractocephalus hemiliopterus), amarillo (Zungaro zungaro); y escamados como: arenga amarilla (Pellona castelanaeana), carahuazú (Astronotus ocellatus), corvina (Plagiscion squamosissimus), puño (Serrasalmus rhombeus), reportaron cifras muy superiores al valor de referencia permitido (0.5 mg HgT/kg), alertando sobre la biodisponibilidad del mercurio en los ecosistemas acuáticos.

Estos hallazgos muestran la necesidad de continuar el monitoreo en la región y de intensificar la colecta de muestras a lo largo del régimen hidrológico, contribuyen a la implementación del Plan Único Nacional de Mercurio y al Plan de Acción Sectorial Ambiental de Mercurio con horizonte proyectado a 2023. E igualmente, sugieren la necesidad de realizar estudios regionales en la Amazonia para establecer contaminación con otros metales pesados.

Indicador de tallas mínimas de peces IDTM

Entre los múltiples servicios ecosistémicos que ofrecen los ambientes acuáticos, se incluye la provisión de agua y de alimentos, este último se encuentra especialmente representado por la carne de pescado, la cual es la fuente proteica más importante de las poblaciones amazónicas. El Instituto SINCHI ha identificado al menos 72 tipos de peces con fines de consumo en puertos y plazas de mercado, siendo las especies preferidas por los consumidores aquellas que son migratorias, como es el caso del sábalo (B. amazonicus), gamitana (C. macropomum), bocachico (P. nigricans), palometa (Mylossoma sp.), waracú (Leporinus friderici), chillón (Potamorhina sp.) y varias especies de bagres como el dorado (Brahyplatystoma rousseauxii), lechero (B. filamentosum), pirabutón (B. vaillantii) y pintadillos (Pseudoplatystoma sp), quienes además han tenido un histórico interés comercial en la región.

Para la pesquería comercial de consumo en la Amazonia, menos de 30 especies son las responsables por la dinámica socioeconómica que incorpora zonas pesqueras colombianas y de países vecinos, y que se sustenta especialmente sobre bagres pimelódidos y algunos peces carácidos. Y particularmente, la ciudad de Leticia es la localidad de acopio más importante de esta pesquería en la Amazonia colombiana, ya que influencia la economía de regiones fronterizas de Brasil y de Perú, sobre la que se estima un intercambio comercial de primera compra de U$7 millones de dólares/año (Agudelo 2007).

Desde el año 2002, el Instituto SINCHI ha presentado información sobre la evolución de los tamaños de captura de peces amazónicos a partir del indicador denominado: “Captura de bagres comerciales por debajo de las tallas reglamentarias en la Amazonia colombiana”. El indicador estima la proporción de peces capturados que presentan longitudes inferiores al Tamaño Mínimo de Captura -TMC reglamentado por la legislación pesquera colombiana [7], este indicador permite cuantificar el riesgo que puede generar la pesca para permitir que suceda la renovación de un determinado recurso pesquero. Los análisis se hacen a partir de las longitudes estándar para cada especie, contabilizando la cantidad de animales encontrados por debajo del tamaño mínimo reglamentario (Alonso y Agudelo 2002):

IDTm=(ICDTR/TIC)*100

Donde: IDTm = indicador por debajo de tamaño mínimo; ICDTR = número de individuos capturados por debajo del tamaño reglamentario; TIC = número total de individuos capturados. Para facilitar la interpretación del IDTm se utilizan cuatro categorias de clasificación (Alonso y Agudelo 2002):


[7]Las TMC, conocidas también como Tallas Mínimas Reglamentarias – TMR, corresponden a las establecidas por el Instituto Nacional de Pesca y Acuicultura -INPA a través del acuerdo 0075 de 1989, acogidas actualmente por la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca – AUNAP.

Color

Porcentaje (%)

Impacto Negativo

Verde

< 25

Bajo

Amarillo

25 – >50

Medio

Anaranjado

50 – >75

Alto

Rojo

75 – 100

Muy alto

Tabla 7.  Categorías de clasificación del indicador IDTm

Los resultados obtenidos en la evaluación de línea base (quinquenio 1995 – 2000) y las actualizaciones bienales hechas desde 2002 hasta el presente pueden consultarse en el portal web del Instituto SINCHI, al interior del servicio de información de la Colección Ictiológica de la Amazonia Colombiana – CIACOL (https://www.SINCHI.org.co/ciacol)

Durante la vigencia 2019 se realizó la octava actualización del Indicador de Captura de Peces Comerciales en Amazonia por debajo de las tallas reglamentarias – IDTm (a partir de datos 2017-2018), los resultados evidenciaron el sostenimiento de una alta presión de la pesca sobre el tamaño de los peces para las zonas de influencia de Leticia, y Media para el sector de Puerto Leguízamo.

En Leguízamo, la problemática recurrente está asociada a la pesca de individuos pequeños de Pintadillo rayado (Pseudoplatystoma punctifer), baboso (B. platynemum) y Lechero (B. filamentosum) ya que durante todos los periodos de análisis, la calificación del impacto ha sido alta. Mientas que el impacto para el bagre barbachato ha venido en aumento en los dos últimos periodos (Figura 26).

Figura 26. Evolución del IDTm para tres especies de bagres en el río Putumayo

Figura 26. Evolución del IDTm para tres especies de bagres en el río Putumayo. Convenciones: barras de color verde definen bajo impacto, barras de color amarillo impacto medio, barras de color naranja alto impacto, barras de color rojo muy alto impacto. Fuente: Grupo de Ecosistemas acuáticos, Instituto SINCHI 2020

Para el río Guaviare, se estableció un valor medio de impacto negativo por las labores pesqueras en torno del 33% (impacto negativo medio). Igual que con la cuenca del Putumayo, fue sobre los bagres pintadillos (Pseudoplatystoma sp) donde se está ejerciendo una mayor afectación por pesca (84%), como también sobre los bagres baboso (B. platynemum) y pirabutón (Brachyplatysoma vaillantii) (Figura 27).

Figura 27 Comparación de la línea base y el período evaluado por especie para el Río Guaviare.

Figura 27.  Comparación de la línea base y el período evaluado por especie para el Río Guaviare. Convenciones: barras de color verde definen bajo impacto, barras de color amarillo impacto medio, barras de color naranja alto impacto, barras de color rojo muy alto impacto. Fuente: Grupo de Ecosistemas acuáticos, Instituto SINCHI 2020

Para la pesquería en río Amazonas, es notoria la evolución negativa del indicador en varias especies, pero particularmente muestra la recurrencia en la pesca por debajo de talla reglamentaria de pintadillo rayado, lo que deja en evidencia una sobrepesca por crecimiento (Figura 28).

Figura 28. Evolución del indicador de captura de peces comerciales por debajo de tallas reglamentarias en río Amazonas

Figura 28. Evolución del indicador de captura de peces comerciales por debajo de tallas reglamentarias en río Amazonas, presentando: línea base del indicador para bagres con datos del quinquenio 1995-2000 (imagen superior izquierda), indicador de bagres hasta el año 2018 (imagen superior derecha), cálculo del indicador para todas las especies entre los años 2000-2018 (imagen inferior izquierda) y cálculo del indicador para pintadillo rayado Pseudoplatystoma punctifer entre los años 2000-2018 (imagen inferior derecha). (Convenciones: barras de color verde definen bajo impacto, barras de color amarillo impacto medio, barras de color naranja alto impacto, barras de color rojo muy alto impacto). Fuente: Grupo de Ecosistemas acuáticos, Instituto SINCHI 2020.

Los resultados presentados denotan una evolución negativa en varias especies, pero particularmente con recurrencia del problema para el pintadillo rayado (Pseudoplatystoma punctifer), evidenciando sobrepesca por crecimiento. Resultado de estos hallazgos se recomienda establecer áreas de conservación o refugio para los grandes bagres amazónicos, que incorpore manejo especial de sus hábitats, períodos de restricción a la captura y uso de aparejos de pesca apropiados, con el fin de proteger la especie a lo largo de su ciclo de vida durante las migraciones y en la época reproductiva. Igualmente, potencializar la gobernanza de las comunidades locales, principales usuarias del recurso con fines comerciales y de consumo, mediante acuerdos de pesca en pro de respetar tallas captura y lugares de protección (Agudelo et al. 2009).

Fichas del capítulo I

Fichas del capítulo I, 2019